Una vez tengas elegidas las fechas en que vas a realizar el traslado, solicita con anticipación suficiente, entre 3 y 4 semanas, la visita a domicilio de al menos tres empresas de mudanzas y compara. Existen empresas que intentan evitar firmar contrato con el cliente, por eso es preciso ser extremadamente cuidadoso a la hora de escoger.
Averigua no sólo precios, también el servicio y el grado de compromiso que establecen en cada caso. Desconfía de empresas sin domicilio conocido y con presupuestos demasiado bajos, la calidad y el buen servicio generalmente se hacen pagar; pero piénsalo dos veces antes de aceptar el más caro, podrías estar pagando innecesariamente de más.
Los siguientes puntos son importantes para escoger lo que más te convenga:
- Planificación: para hacer una mudanza con garantías hay que planificarla con tiempo.
- Presupuesto previo sin compromiso: no dudes en solicitarlo.
- Rechaza los presupuestos telefónicos: se corre el riesgo de una modificación al precio una vez que los muebles estén presentes. Una visita del representante de la empresa de mudanzas es necesaria para establecer las condiciones en que se hará la mudanza y la elaboración del presupuesto.
- Exige que le indiquen las tarifas de referencia.
- Comprueba la solvencia y profesionalidad: dos indicadores que puedes exigirle a la empresa que acredite antes de firmar nada: que esté inscrita en el Registro de Empresas y que cuente con un seguro para el transporte de sus pertenencias.
- Contrato y letra pequeña: leer con atención los términos del contrato y comprobar que figuran en el mismo, como mínimo: los datos detallados de la empresa de mudanzas, el inventario de nuestros enseres, el recorrido de la mudanza, las fechas de inicio y terminación de la mudanza y el precio total a pagar.
- Seguro de tus enseres: solicita información detallada sobre la cobertura del seguro contratado por la empresa de mudanzas y sus posibles ampliaciones.
- Prepárate para una posible reclamación: en cualquier contratación de un servicio es esencial prepararse desde antes de contratar por si las cosas se complican.
- Supervisar la carga y descarga de pertenencias: Así poder estar presente en caso de ocurrir algún incidente con lo embalado.
- Objetos de gran valor: conviene que sea uno mismo quien los traslade y empaque.
Foto: Mudanzas Islatrans