Cambiarte de casa puede convertirse en una verdadera pesadilla por culpa de la mudanza, especialmente si es a otra ciudad que está relativamente lejos, o bien a otro país. Las mudanzas internacionales son prácticamente iguales que las que puedas hacer en territorio nacional, pero hay algunos aspectos que se deben tener en cuenta.
Si tienes que enfrentarte a un cambio de casa internacional próximamente, toma nota de todos estos consejos para que sepas qué pasos seguir y hacerlo de la forma más efectiva posible.
Contratar una empresa de mudanzas
En el caso de mudanzas a otro país, lo más recomendable es que el contacto con las empresas de mudanzas lo hagas cuanto antes, ya que podrán asesorarte con todo detalle. Puedes pedir presupuesto a varias y elegir la que más te interese en función del precio, calidad y tiempo de entrega. Es importante que la que elijas te ofrezca toda la ayuda necesaria para que puedas hacer el cambio sin mucho trastorno.
Documentación
Pregunta al personal de la empresa de mudanzas por la normativa del país de destino en cuestión de mudanzas internacionales, ya que pueden variar de uno a otro y es mejor evitar sorpresas que puedan denegar la entrada de tus bienes allí. Ellos te indicarán la documentación que vas a necesitar, siendo lo más habitual el pasaporte o DNI, así que procura que su fecha de caducidad quede todavía lejos.
Fecha de recogida y entrega
Al tratarse de otro país, procura contratar la mudanza con toda la antelación posible, así la empresa de mudanzas puede empezar a preparar tu traslado, lo que hará que sea más sencillo cuando llegue el momento. En cuanto a la fecha de entrega, puede variar en función de si la mudanza es exclusiva para ti o en grupaje, que es cuando hay que esperar a que se junte una determinada cantidad de mercancía con varios clientes para poder hacer el envío. Esta última fórmula retrasa la fecha de entrega, pero es más barata.
Seguro
Es recomendable que contrates un seguro de total cobertura, así evitarás riesgos innecesarios y quedará cubierta toda tu mercancía en caso de que se rompa, extravíe o estropee algo. Este seguro es mucho más importante si en tu traslado incluyes objetos de especial valor, antigüedades, obras de arte, etc.
El día de la mudanza
Cuando llegue el día en el que van a recoger tus pertenencias, procura estar tú para dar las indicaciones necesarias al personal, y lo mismo el día de entrega, así indicarás en dónde se debe dejar cada caja, mueble, etc. Ponte ropa cómoda en ambos casos, ya que es probable que entres y salgas de casa varias veces y tengas que moverte con agilidad.
Como recomendación final, es importante que tengas en cuenta que una mudanza siempre es una molestia, pero no hay que desesperar. Ten paciencia y piensa que son sólo unos días, en poco tiempo estarás en tu nuevo hogar y habrá merecido la pena la "tortura" sufrida.