El seguro es una parte muy importante de la mudanza, ya que nos servirá para reclamar cualquier problema que surja. Es obligatorio, además de muy recomendable si queremos disfrutar de un servicio de calidad sin sobresaltos.
¿Quieres saber para qué sirven, qué cubren y si merece la pena contratarlo? Sigue leyendo, en este artículo te explicamos todo lo que necesitas saber sobre los seguros de mudanzas.
¿Para qué sirven?
La contratación de un seguro sirve para cubrir posibles riesgos que pudieran producirse durante el trascurso de la mudanza y que afecte al estado y valor de los enseres. No todas las empresas lo ofrecen, a pesar de que la ley lo exige. Las empresas serias lo incluyen como parte del servicio y solo las empresas poco profesionales valoran realizar una mudanza sin contratar un seguro previamente. Por eso es un distintivo de calidad a la hora de contratar nuestra mudanza.
Desde la Federación Española de Empresas de Mudanzas solo trabajan si hay un seguro contratado, aspecto que resulta básico para ofrecer un servicio con garantías. Y es que, si se rompe, deteriora o pierde algún objeto durante el traslado, la empresa estará obligada a compensarnos económicamente por ello. De ahí que resulte fundamental para que el trabajo se desarrolle correctamente.
¿Qué tipos de seguros se contratan y qué cubren?
Cualquier empresa profesional que se precie ofrecerá la contratación de un seguro de responsabilidad civil, que será el que cubra cualquier problema que pueda producirse durante el embalaje, desmontaje, montaje y transporte de muebles y que afecte a partes de nuestra vivienda y edificio (arañazos o golpes en paredes, suelos o puertas, desperfectos en el ascensor o en el portal, etc.).
Estos seguros suelen contar con una franquicia de 300 euros. De este modo, si se produce algún daño, los primeros 300 euros nos corresponderán a nosotros.
El seguro de responsabilidad civil no cubre rotura o pérdida de objetos personales.
Otro de los seguros disponibles es el de transporte, que también cuenta con franquicia, la cual puede oscilar entre 90 y 100 euros, importe que deberá abonar el cliente. Este sí cubre nuestras pertenencias y la cantidad a compensar se determina en función del peso de los objetos.
Si queremos asegurar un objeto valioso, con independencia de su tamaño, es indispensable que contratemos un seguro especial para objetos de valor.
¿Son muy caros?
Habitualmente, la contratación de un servicio de mudanzas conlleva la suscripción de un seguro de responsabilidad civil. Lo que tendremos que contratar aparte será el de transporte y el especial para objetos de valor.
Las empresas de mudanzas ofrecen este tipo de seguros; si no, tendremos que contratarlo aparte con una aseguradora. Normalmente suelen rondar los 150-180 euros, pero todo depende de la distancia que haya entre ambas viviendas y del volumen de carga a transportar.
Finalmente, en el caso del seguro especial, el importe de este dependerá de lo que vayamos a asegurar, de la distancia a la que se encuentre el nuevo domicilio y de la especificidad del objeto (no es lo mismo un seguro para un cuadro que hayamos pintado nosotros que uno para transportar un original de Miró, por ejemplo).